La captura ha generado una considerable atención mediática debido al perfil público del imputado.

La detención se efectuó el sábado 4 de octubre de 2025 por elementos de la Policía de Investigación de la Fiscalía de Jalisco, en cumplimiento de una orden de aprehensión girada por el Juzgado Décimo de Control, Enjuiciamiento y Justicia Integral para Adolescentes. Bravo, de 44 años, fue imputado formalmente el domingo 5 de octubre y se le dictó la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa en el complejo penitenciario de Puente Grande. La acusación se deriva de una denuncia que señala que el exseleccionado nacional habría abusado de una adolescente en diversas ocasiones durante los últimos meses, con presuntos antecedentes de conductas similares que habrían iniciado en 2019, cuando la víctima tenía 11 años. Durante la audiencia inicial, la defensa del exfutbolista se acogió a la duplicidad del término constitucional de 144 horas, por lo que la audiencia de vinculación a proceso, donde se definirá formalmente su situación jurídica, fue programada para el próximo 10 de octubre. El delito que se le imputa está previsto en los artículos 142-L y 142-Ñ del Código Penal para el Estado Libre y Soberano de Jalisco.

Algunos reportes periodísticos mencionan que la víctima habría grabado al exfutbolista, y que dicho material gráfico forma parte de las pruebas en la carpeta de investigación. El caso resalta la aplicación de la justicia sin distinción de la notoriedad pública de los acusados y pone de manifiesto la gravedad de los delitos contra menores.