Gracias a un dispositivo GPS que portaba el oficial, las autoridades lograron rastrear el vehículo en el que era transportado. La persecución culminó en un enfrentamiento armado sobre la avenida Álvaro Obregón, en el fraccionamiento Villa Bonita. Durante el tiroteo, un presunto agresor fue abatido, otros tres fueron detenidos (dos de ellos heridos) y se logró rescatar al agente, quien fue encontrado gravemente herido en la cajuela del vehículo.

A pesar de los esfuerzos médicos, Alexander Rodríguez falleció horas después.

Este suceso se suma a un ataque previo, ocurrido menos de dos semanas antes, contra el vehículo en el que viajaba una nieta del gobernador, evidenciando la escalada de violencia que afecta incluso al círculo cercano de las autoridades estatales.