El vehículo del joven chocó contra un poste y, según su padre, Lucio Isidro Álvarez, fue en ese momento cuando recibió tres disparos: uno en el cuello, otro en el corazón y uno más en la mano. La familia alega que la escena del crimen fue manipulada durante horas e incluso se intentó sembrar un arma para justificar el homicidio. Tras el hecho, familiares y amigos se manifestaron ante la Fiscalía General del Estado para exigir justicia. La dependencia informó que ya inició una carpeta de investigación y que la Dirección de Servicios Periciales y la Policía de Investigación están realizando las diligencias necesarias para robustecer la indagatoria, reiterando su compromiso con la política de cero impunidad.