La intensificación de las redadas migratorias del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Chicago, una ciudad santuario, ha generado un clima de miedo en las comunidades latinas y ha provocado un incidente fatal, lo que ha suscitado la condena de líderes locales y del gobierno mexicano. Bajo la denominada “Operación Midway Blitz”, la administración Trump ha desplegado cientos de agentes federales en Chicago con el objetivo de detener a inmigrantes indocumentados con antecedentes penales. Sin embargo, el impacto se ha sentido en toda la comunidad. Comerciantes del barrio de La Villita reportan caídas en las ventas de hasta un 50%, ya que el temor ha llevado a que la gente evite salir de casa. La situación escaló trágicamente cuando un agente del ICE disparó y mató a Silverio Villegas González, un cocinero mexicano de 38 años, durante un intento de arresto.
Según las autoridades estadounidenses, Villegas se resistió y arrastró al agente con su vehículo, lo que llevó al oficial a disparar “temiendo por su vida”.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México condenó la violencia y exigió una “investigación rigurosa” para esclarecer los hechos.
Líderes latinos en Chicago, como el representante demócrata Chuy García, han expresado su consternación, cuestionando si el ICE puede “matar a uno de nuestros vecinos a plena luz del día”. Las redadas y el ambiente de tensión han afectado incluso las celebraciones de la Independencia de México, con muchos connacionales optando por no asistir a eventos públicos por temor a ser detenidos.
En resumenLas redadas migratorias selectivas de Trump en Chicago han creado un ambiente de miedo, han afectado negativamente las economías locales y han culminado en un tiroteo fatal, intensificando el conflicto entre el gobierno federal y las ciudades santuario.