El gobierno de Donald Trump ha restablecido un examen de ciudadanía más difícil y extenso, una medida que busca hacer más riguroso el proceso de naturalización en Estados Unidos. La nueva prueba, que se implementó originalmente en el primer mandato de Trump, aumenta el número de preguntas y la complejidad de los temas. El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) anunció que el nuevo examen se administrará a quienes presenten sus solicitudes a partir del 20 de octubre. Los cambios principales incluyen un aumento en el número de preguntas que se deben responder correctamente, pasando de 6 de 10 a 12 de 20. Además, el banco de preguntas se ha ampliado de 100 a 128, con un enfoque en temas más complejos y menos respuestas de una sola palabra. Esta versión del examen ya estuvo vigente brevemente entre diciembre de 2020 y abril de 2021, antes de que la administración Biden la revirtiera en favor de la versión de 2008. Un portavoz de USCIS declaró que la prueba revisada garantizará que los nuevos ciudadanos "se integren plenamente y contribuyan a la grandeza de Estados Unidos". Entre las preguntas que generaron escrutinio en la versión anterior se encontraban: "¿Por qué Estados Unidos entró en la guerra de Vietnam?"
y "¿A quién representa un senador estadounidense?
", con respuestas que se consideraron más específicas y con una carga ideológica.
Esta medida es parte de un endurecimiento más amplio de las vías legales de inmigración, que también incluye investigaciones de antecedentes más rigurosas y revisiones más estrictas del "buen carácter moral" de los solicitantes.
En resumenLa administración Trump ha reinstaurado un examen de ciudadanía más largo y difícil, aumentando el número y la complejidad de las preguntas, como parte de una política más amplia para endurecer el proceso de naturalización y asegurar una mayor integración de los nuevos ciudadanos.