La medida ha sido criticada por líderes empresariales y grupos comerciales, quienes expresaron preocupación por el impacto en su capacidad para cubrir puestos cruciales.

Se espera que la nueva cuota enfrente impugnaciones legales. La mayoría de los beneficiarios de la visa H-1B provienen de la India, cuyo gobierno manifestó preocupación por las “consecuencias humanitarias” que la medida podría causar a las familias.