El anuncio de apoyo se produce mientras el presidente Milei, un aliado cercano de Trump, enfrenta una corrida del peso y una disminución de las reservas de divisas tras reveses políticos, como una derrota en las elecciones de la provincia de Buenos Aires. Milei viajó a Nueva York para reunirse con Trump y Bessent en el marco de la Asamblea General de la ONU, con el objetivo de negociar un préstamo del Tesoro estadounidense que, según especulaciones, podría alcanzar los 30 mil millones de dólares, aunque el canciller argentino, Gerardo Werthein, indicó que se trabaja en “una cifra más exigua”. Bessent detalló que el apoyo podría incluir préstamos al banco central argentino, compras directas de divisas y la adquisición de deuda pública argentina.

La relación cercana entre Trump y Milei, a quien el presidente estadounidense ha descrito como su “presidente favorito”, ha estrechado los lazos estratégicos entre ambos países. La economía argentina es considerada cada vez más importante para Estados Unidos en su competencia con China por la influencia en América Latina y la búsqueda de minerales estratégicos como el litio.

Tras las declaraciones de Bessent, los mercados financieros argentinos reaccionaron positivamente, con un salto en los precios de los bonos del país. La jefa del FMI, Kristalina Georgieva, también saludó el apoyo estadounidense a las “políticas sólidas de estabilización y crecimiento” de Milei. El presidente argentino agradeció el “apoyo incondicional” y afirmó que “los que defendemos las ideas de la libertad debemos trabajar juntos”.