“La izquierda radical está causando este problema”, declaró, vinculando el tiroteo con el reciente asesinato del activista conservador Charlie Kirk. Por su parte, el vicepresidente JD Vance también condenó el ataque como un acto de la “extrema izquierda” con motivaciones políticas. Esta narrativa contrasta con la de los demócratas, quienes acusan a los republicanos de intentar controlar el relato para justificar sus políticas migratorias de mano dura.