Los demandantes argumentan que la tarifa es ilegal, ya que el presidente no tiene la autoridad para crear nuevos impuestos por orden ejecutiva, y advierten que la medida tendrá consecuencias devastadoras.

“Sin alivio, los hospitales perderán personal médico, las iglesias perderán pastores, las aulas perderán maestros y las industrias en todo el país corren el riesgo de perder innovadores clave”, afirmaron las organizaciones en un comunicado.

El programa de visas H-1B, creado para atraer talento en campos especializados, es una vía crucial para contratar enfermeros, médicos y educadores, sectores que ahora se ven amenazados por un costo que muchos consideran “exorbitante” e inviable.