La tensión se intensificó cuando The New York Times reportó que Trump ordenó a su enviado especial, Richard Grenell, suspender todos los esfuerzos diplomáticos con Caracas.

Esto ocurrió a pesar de que, según los informes, funcionarios venezolanos habían ofrecido a Washington concesiones económicas de gran alcance, como una participación dominante en el petróleo y otros recursos minerales del país, las cuales fueron rechazadas.

En respuesta, el gobierno de Maduro ha iniciado ejercicios militares denominados “Plan Independencia 200” y ha advertido: “Si los gringos atacan, responderemos”. La situación ha generado alarma regional, con líderes como el presidente colombiano Gustavo Petro acusando a EE.UU. de abrir un “escenario de guerra” en el Caribe.