La intervención de Trump en la política interna argentina ha sido criticada por legisladores demócratas en EE.

UU., quienes lo acusan de priorizar rescates extranjeros para favorecer a aliados políticos.

La líder opositora argentina, Cristina Fernández de Kirchner, reaccionó en redes sociales, interpretando las palabras de Trump como una injerencia directa: “Argentinos... ya saben lo que hay que hacer”. El respaldo de Trump es visto como un impulso crucial para Milei, cuyo partido enfrentó un revés en elecciones provinciales recientes y ahora se juega su capacidad de implementar reformas en las legislativas del 26 de octubre. Trump describió a Milei como “MAGA hasta el final”, adaptando su lema a “Hagamos grande a Argentina otra vez”.