Sin embargo, la respuesta de Trump fue reticente.

“Preferiríamos mucho más que no necesitaran los Tomahawks. Preferiríamos mucho más que la guerra terminara, para ser honestos”, declaró Trump, expresando su preocupación por no “agotar” el arsenal estadounidense.

La postura del presidente pareció cambiar tras una llamada telefónica con Vladímir Putin, en la que acordaron una próxima cumbre en Budapest.

Tras su reunión con Zelenski, Trump instó a ambas partes a detener el conflicto.

“Deberían detenerse donde están.

Que ambos clamen victoria; que la historia decida”, escribió en su red social Truth Social. Por su parte, Zelenski se mostró en desacuerdo con la percepción de Trump sobre la disposición de Moscú, afirmando que Putin “no está listo” para la paz. A pesar de la negativa sobre los misiles, Zelenski calificó la reunión como “productiva” y dijo confiar en que Trump “quiere poner fin a esta guerra”.