El presidente Donald Trump ha conmutado la sentencia del excongresista republicano George Santos, quien cumplía una condena de más de siete años en una prisión federal por fraude y robo de identidad. La decisión, anunciada por Trump en su red social, resultó en la liberación inmediata de Santos, quien había estado en prisión solo unos meses. En su justificación, Trump describió a Santos como "un poco pícaro", pero argumentó que la sentencia era excesiva en comparación con otros casos, mencionando al senador demócrata Richard Blumenthal. El presidente afirmó que Santos había sido "terriblemente maltratado" en prisión, sufriendo largos periodos de aislamiento. "Acabo de firmar una Conmutación de la pena, liberando a George Santos de la prisión INMEDIATAMENTE", publicó Trump. Una conmutación reduce la pena pero no anula la condena original.
Santos, quien fue elegido para la Cámara de Representantes en 2022, fue expulsado del Congreso en diciembre de 2023 después de que una investigación revelara que había inventado gran parte de su biografía y malversado fondos de campaña. Admitió haber engañado a donantes, utilizado sus tarjetas de crédito sin autorización para compras de lujo y haber cobrado fraudulentamente prestaciones por desempleo. La investigación del comité de ética del Congreso reveló que los fondos se usaron para tratamientos de Botox, suscripciones a OnlyFans y vacaciones.
La decisión de Trump ha generado críticas, y algunos republicanos, como el congresista Nick LaLota, han señalado que Santos debería dedicar su vida a mostrar arrepentimiento.
En resumenLa conmutación de la sentencia de George Santos por parte de Donald Trump representa un controvertido uso del poder presidencial, liberando a un excongresista condenado por fraude bajo el argumento de un trato injusto y una pena excesiva, lo que ha provocado un debate sobre la justicia y la lealtad política.