Las nuevas penalizaciones bloquean todos los bienes e intereses de Rosneft, Lukoil y sus filiales en territorio estadounidense, prohíben transacciones por parte de personas o empresas de EE.

UU. y las excluyen del sistema financiero del país.

El presidente Donald Trump calificó las medidas como “sanciones masivas” y expresó su esperanza de que ejerzan presión sobre Putin para que “se vuelva más sensato”. Estas acciones coinciden con la cancelación de una cumbre entre Trump y Putin, y con la visita a Washington del secretario general de la OTAN, Mark Rutte, quien destacó la importancia de los sistemas de defensa antiaérea estadounidenses que los países europeos están comprando para Ucrania. La Unión Europea también acordó nuevas sanciones, incluyendo la prohibición de importación de gas natural ruso para 2026.