La crisis también ha golpeado duramente los programas de asistencia social. El Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), que beneficia a 42 millones de estadounidenses, vio sus fondos suspendidos, lo que obligó a dos jueces federales a ordenar al gobierno el uso de fondos de emergencia. A pesar de ello, la administración Trump anunció que solo cubriría parcialmente los beneficios. El presidente Trump declaró en su red social Truth que los beneficios del SNAP “¡serán otorgados únicamente cuando los demócratas de la izquierda radical abran el Gobierno, algo que pueden hacer fácilmente, y no antes!”. El mandatario ha culpado a la oposición por el cierre y ha instado a los republicanos a eliminar el “filibusterismo” en el Senado para aprobar el presupuesto con una mayoría simple. Este cierre ha sido citado por el propio Trump como una de las causas de las derrotas republicanas en las elecciones locales de 2025, evidenciando su profundo impacto político y social.