Por su parte, Washington suspenderá las nuevas tasas portuarias impuestas a buques vinculados a China.

A pesar de la tregua, la relación sigue siendo delicada.

El embajador chino en Washington, Xie Feng, delineó cuatro “líneas rojas” que Estados Unidos no debe cruzar para mantener el acuerdo, incluyendo temas sensibles como Taiwán y los derechos humanos, lo que demuestra que la desconfianza persiste entre ambas potencias.