Esta iniciativa utiliza el mecanismo de “nación más favorecida” para obtener precios preferenciales. Además, se fijó un costo de 150 dólares para la dosis inicial de las versiones orales de los fármacos GLP-1, que aún están en fase de prueba. Los beneficiarios de Medicare podrán acceder a estos tratamientos con un copago de 50 dólares mensuales. Trump celebró el pacto en el Despacho Oval, declarando que es “un triunfo para los pacientes estadounidenses que salvará vidas y mejorará la salud de millones”. A cambio de los descuentos, las compañías farmacéuticas obtendrían beneficios arancelarios y un mayor acceso a los beneficiarios de programas federales. Este anuncio se produce en un contexto de creciente preocupación por el costo de vida en el país, un tema que, según encuestas, fue un factor en las recientes derrotas republicanas en elecciones locales.