Sin embargo, negó que existiera una “parcialidad institucionalizada”. Los abogados de Trump enviaron una carta formal exigiendo una “retractación inmediata, completa y justa del documental”, una disculpa pública y una “compensación adecuada” antes del 14 de noviembre, o de lo contrario procederán legalmente.

Trump reaccionó a las dimisiones en su red social Truth Social, calificando a los implicados de “periodistas corruptos” y “personas muy deshonestas que intentaron manipular las elecciones presidenciales”.

La disputa resulta embarazosa para el gobierno laborista británico de Keir Starmer, que ha buscado mantener buenas relaciones con la administración Trump. La BBC ha confirmado la recepción de la carta y ha declarado que responderá “a su debido tiempo”, mientras se prepara para un posible enfrentamiento legal con el presidente de Estados Unidos.