La medida busca desarticular las operaciones financieras del grupo criminal y restringir su acceso al sistema financiero estadounidense.

La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) sancionó a 27 personas y entidades, mientras que la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN) propuso medidas especiales contra 10 establecimientos de juego con sede en México. El grupo sancionado, de origen albanés y conocido como "Grupo de Crimen Organizado Hysa", está liderado por los hermanos Luftar, Arben, Ramiz, Fatos y Fabjon Hysa. Según el Tesoro, utilizaron su imperio de casinos y restaurantes como fachada para blanquear ganancias del narcotráfico, operando con el consentimiento del Cártel de Sinaloa en los estados de Sinaloa, Sonora, Baja California y Tabasco. La investigación reveló que la red facilitó el lavado de más de 2 millones de dólares en pagos ilícitos entre 2017 y 2024 y movió más de mil millones de pesos a través de una red internacional que incluía a Canadá, Polonia y Albania.

John K. Hurley, subsecretario del Tesoro, declaró: "Nuestro mensaje a quienes apoyan a los cárteles es claro: rendirán cuentas".

La acción coordinada se produce días después de que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de México bloqueara las cuentas de 13 casas de apuestas por vínculos con el crimen organizado.