"Los políticos mienten, no hay empatía, y cuando ignoras lo que ocurre en otra parte del mundo, tarde o temprano te llega a ti", advirtió con un tono sombrío.

La actriz también manifestó su preocupación como madre, confesando sentir "miedo por mis hijos" ante un futuro donde el cinismo y la falta de empatía se normalicen. Los clips de sus declaraciones se difundieron rápidamente en redes sociales, donde su posicionamiento fue tanto aplaudido como criticado, evidenciando la polarización que generan estos temas. Lawrence se defendió de quienes consideran que los artistas no deben opinar sobre política, aclarando que su intención no es "echar más leña al fuego", sino señalar que la responsabilidad final recae en los representantes electos.

Este momento se convirtió en un claro ejemplo del poder de las plataformas digitales para amplificar la voz de una celebridad y convertir una declaración en un evento de discusión internacional.