El usuario que publicó el video lo acompañó con la frase “Juan Gabriel sigue vivo ya en París” y la canción “Querida”, lo que fue suficiente para que la publicación superara los dos millones de reproducciones. La reacción fue inmediata: mientras algunos bromeaban llamándolo “Jean Gabrielle”, otros se dedicaron a comparar fotografías para sustentar la teoría.

El fenómeno se vio alimentado por declaraciones de figuras cercanas al artista, como su ahijado Santaella, quien afirmó: “Yo el cuerpo no lo vi, y yo ya he aprendido algo, yo lo que no veo no lo creo”.

Además, se difundió la noticia de que la CURP de Alberto Aguilera Valadez sigue activa en los registros del gobierno mexicano, añadiendo más leña al fuego de la conspiración. Este episodio demuestra el poder de las redes sociales para mantener viva la leyenda de un ícono, donde un simple video puede generar un debate nacional y mantener vigente el mito de su supervivencia.