La publicación en Instagram fue interpretada como una sátira política que dividió opiniones entre sus seguidores. El atuendo, que creaba una ilusión óptica en la que Derbez parecía ir “montado” sobre los hombros de una figura inflable de Trump, fue visto como una crítica directa a las políticas migratorias y la postura del mandatario hacia la comunidad latina. Derbez, quien ha sido un crítico abierto de Trump, acompañó la celebración con su esposa Alessandra Rosaldo, disfrazada de Jessie de Toy Story, y su hija Aitana. La publicación en Instagram desató un acalorado debate: mientras algunos seguidores aplaudieron su creatividad y atrevimiento, otros lo acusaron de falta de respeto y le advirtieron en tono de broma que su visa podría ser cancelada.

Comentarios como “Te van a cancelar la visa!

!” y “El próximo deportado” se mezclaron con elogios como “¡El mejor disfraz del año!”.

Este acto se inscribe en una larga tradición de sátira política durante Halloween, donde celebridades como Katy Perry (disfrazada de Hillary Clinton) y Orlando Bloom (como Donald Trump) han utilizado sus disfraces para emitir comentarios sociales.

La viralidad del disfraz de Derbez demostró cómo el humor puede ser un vehículo para la crítica y generar conversación sobre temas relevantes.