A pesar del aumento, la operación sigue enfrentando resistencia.

El Consejo de Administración de Sabadell, el cuarto banco más grande de España, ya había rechazado la oferta inicial, considerándola una infravaloración significativa de la entidad y recomendando a sus accionistas no aceptarla. El desenlace de esta OPA hostil sigue siendo incierto y es seguido de cerca por los mercados, dado su potencial para reconfigurar el panorama financiero en Europa.