La transacción se financia con 36 mil millones de dólares en capital y 20 mil millones en deuda proporcionada por JPMorgan Chase. Esta adquisición se produce en un momento de crecimiento más lento para la industria de los videojuegos, valorada en 178 mil millones de dólares, tras el auge de la pandemia. EA, creadora de franquicias como *Madden NFL*, *EA Sports FC* y *Los Sims*, se convertirá en una empresa privada y dejará de cotizar en el Nasdaq, lo que se espera que elimine la presión de los informes de ganancias trimestrales.

Andrew Wilson permanecerá como director ejecutivo.

El PIF, que ya poseía el 9.9% de EA, refuerza su posición en el sector del juego como parte de su estrategia de diversificación económica. La operación es vista como una señal del apetito de Wall Street por grandes fusiones bajo la administración Trump y supera la privatización de TXU en 2007 (45 mil millones de dólares). Este movimiento sigue a la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft hace dos años, destacando una tendencia de consolidación en la industria. Se espera que el acuerdo se cierre a principios de 2026 o 2027, sujeto a la aprobación de reguladores y accionistas.