Ambas compañías suscribieron un acuerdo no vinculante para explorar una potencial oferta conjunta, habiendo ya presentado una propuesta inicial no vinculante.

Actualmente se encuentran en el proceso de *due diligence* para valorar los activos antes de decidir si procederán con una oferta formal. Según fuentes citadas por Bloomberg, la división de los activos sería estratégica: América Móvil, a través de su filial ClaroVTR, estaría interesada en el negocio de telefonía móvil, mientras que Entel se enfocaría en las operaciones de línea fija y banda ancha. Esta posible adquisición se enmarca en la estrategia de Telefónica de reorganizar su presencia en América Latina, desinvirtiendo en mercados no considerados estratégicos para reducir deuda. La noticia fue bien recibida por el mercado, provocando un alza del 4.7% en las acciones de Entel. Para evitar problemas regulatorios, las empresas firmaron acuerdos de confidencialidad (*clean team agreements*) para el intercambio de información bajo estrictas normas de libre competencia. Cualquier transacción final requerirá la aprobación de la Fiscalía Nacional Económica de Chile.