Citigroup ha rechazado formalmente la oferta de Grupo México para adquirir el 100% de Banamex, poniendo fin a la especulación y reafirmando su estrategia original de desinversión. La decisión mantiene el plan de vender una participación del 25% al empresario Fernando Chico Pardo y posteriormente realizar una Oferta Pública Inicial (OPI) para el resto del capital del banco. La sorpresiva oferta de Grupo México, conglomerado del empresario Germán Larrea, sacudió al mercado financiero, provocando una caída de más del 15% en el valor de sus acciones, la peor desde 2008. La propuesta, valuada en aproximadamente 9,300 millones de dólares, contemplaba la adquisición total o del 75% de Banamex, con la intención de mantener el 60% de la inversión e invitar a inversionistas mexicanos y Afores a adquirir el 40% restante. Grupo México aseguró que la operación no requeriría un aumento de deuda significativo, ya que el crédito máximo sería menor a 2,000 millones de dólares, cubierto por líneas ya acordadas.
Además, dio un plazo de 10 días a Citi para una respuesta.
Sin embargo, Citigroup respondió antes del plazo, declarando que, tras evaluar la propuesta bajo "consideraciones financieras y de certeza de la operación", la rechazaba. En su comunicado, el banco estadounidense afirmó: "Creemos firmemente que la operación anunciada el 24 de septiembre de 2025 y la OPI planificada nos permitirán completar la desinversión de Banamex de una manera responsable y maximizar el valor para nuestros accionistas". La decisión fue bien recibida por el mercado, que recuperó parte de las pérdidas de Grupo México. El proceso, que ha contado con el visto bueno del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum en cuanto a la participación de Chico Pardo, subraya la preferencia de Citi por una salida estructurada y con mayor certidumbre regulatoria, en lugar de una venta directa a un solo conglomerado.
En resumenLa negativa de Citigroup a la oferta de Grupo México solidifica el futuro de Banamex, priorizando una venta parcial a Fernando Chico Pardo seguida de una oferta pública. La decisión, que calmó la volatilidad inicial del mercado, subraya la importancia de la certeza operativa y la aprobación regulatoria en transacciones financieras de alto perfil, preparando el escenario para el regreso de Banamex al mercado bursátil con una nueva estructura de propiedad.