El Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) asumió el rol de liquidador y comenzó el pago de depósitos garantizados hasta por 400 mil UDIS, cubriendo al 99.4% de los ahorradores. Autoridades y la calificadora Moody's han señalado que la liquidación no representa un riesgo sistémico para el sistema financiero mexicano, dado que los activos de CIBanco representaban solo el 0.44% del total. Previo a la liquidación, CIBanco ya había vendido su negocio fiduciario a Grupo Financiero Multiva y su cartera automotriz a BanCoppel, en un esfuerzo por mitigar el impacto de las sanciones estadounidenses que entrarían en vigor el 20 de octubre.