El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) calificó la conducta como "inaceptable" y procedió a la baja inmediata del elemento.

El incidente, que se viralizó rápidamente en redes sociales, ocurrió en un edificio federal en Manhattan, uno de los centros donde el ICE suele citar a migrantes para sus audiencias de asilo. En las imágenes se observa a una mujer, identificada como Mónica Moreta Galarza de origen ecuatoriano, suplicando en español a los agentes que no detuvieran a su esposo. En respuesta, uno de los oficiales la lanza violentamente al suelo frente a sus dos hijos pequeños.

La secretaria adjunta del DHS, Tricia McLaughlin, declaró que la conducta del elemento era "inaceptable", lo que llevó a su despido inmediato.

La agresión ha generado una fuerte condena por parte de organizaciones de derechos humanos y ha reavivado el debate sobre las tácticas empleadas por las agencias migratorias estadounidenses. La víctima se refugió junto a sus hijos en la oficina de un legislador local tras el incidente, mientras que su esposo fue finalmente detenido por las autoridades migratorias.