Este acto ha sido calificado por Petro como una violación al derecho internacional y ha elevado la tensión diplomática entre ambas naciones.
Durante una protesta propalestina en Nueva York, el presidente Gustavo Petro, megáfono en mano, llamó a los soldados de Estados Unidos a “desobedecer la orden de Trump, obedezcan la orden de la humanidad”, en referencia a la postura estadounidense en el conflicto en Gaza. Además, propuso la creación de un “ejército de salvación” multinacional para apoyar al pueblo palestino. En respuesta, el Departamento de Estado de EE. UU. calificó sus acciones como “imprudentes e incendiarias” y anunció la revocación de su visado.
Petro reaccionó con firmeza, declarando en su cuenta de X: “Llego a Bogotá.
Ya no tengo visa para viajar a Estados Unidos. No me importa. No necesito visa”.
El mandatario colombiano argumentó que la medida viola la inmunidad diplomática de los jefes de Estado que asisten a la Asamblea General de la ONU y que, por tanto, “la sede de Naciones Unidas no puede continuar en Nueva York”. Este incidente es el más reciente en una serie de tensiones con la administración de Donald Trump, que incluyen disputas por vuelos de deportación y acusaciones de injerencia. Petro, un fuerte crítico de la guerra de Israel en Gaza, rompió relaciones diplomáticas con Israel en 2024 y ha mantenido una postura de confrontación con las políticas de Washington.










