La jefa de Gobierno, Clara Brugada, detalló que la nueva regulación busca "prevenir esta situación tan dolorosa" y se alinea con medidas que también presentará el gobierno federal. Entre los cambios más relevantes, se reduce el límite de velocidad a 30 kilómetros por hora para estas unidades y se prohíbe la circulación de vehículos con más de 40,000 litros de carga de materiales tóxicos o hidrocarburos. Además, las pipas con más de 20,000 litros solo podrán transitar entre las 22:00 y las 05:00 horas, y se les restringirá el paso por vías de acceso controlado.

Para vigilar el cumplimiento, se instalarán radares móviles en los cinco principales accesos carreteros a la capital.

La Fiscalía capitalina concluyó que la explosión del 10 de septiembre no fue provocada por un bache, sino por el exceso de velocidad del conductor, quien ingresó a la curva a entre 44 y 46 km/h. Las nuevas reglas también endurecen los requisitos para los conductores, exigiendo la constancia de un curso de manejo de sustancias peligrosas para obtener la licencia tipo E2. Asimismo, todos los vehículos de este tipo deberán contar con un dictamen de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) y se realizarán puntos de revisión aleatorios para verificar el cumplimiento de la normativa.