Durante el trayecto por el Eje Central y al llegar al Zócalo, estos grupos realizaron pintas, destrozaron comercios con martillos, saquearon tiendas de conveniencia y se enfrentaron directamente con elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). Los actos violentos escalaron con el lanzamiento de cohetones y bombas molotov contra los policías, resultando en varios agentes heridos.

Desde el templete principal, el líder histórico Félix Hernández Gamundi hizo reiterados llamados a no caer en provocaciones.

"Aquí no hay pánico, aquí hay voluntad de lucha, aquí hay voluntad de justicia", exclamó mientras en las orillas de la plancha del Zócalo los encapuchados prendían fuego a maderas y rompían el suelo para lanzar pedazos a los uniformados. Estos incidentes opacaron el mitin central y desviaron la atención de las demandas de justicia que motivaron la convocatoria.