Según datos de FlightAware, la aeronave había llegado a Michigan en marzo de 2025 y no había volado desde entonces. La investigación sobre las causas del accidente está a cargo de la Administración Federal de Aviación (FAA) y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) de Estados Unidos. Grabaciones de control de tráfico aéreo revelaron que uno de los pilotos anunció una “recuperación de pérdida” momentos antes del impacto, sugiriendo una pérdida de control de la aeronave. La SRE expresó sus condolencias y reafirmó su compromiso de cooperar con las autoridades estadounidenses.