Además, señaló que los recientes bloqueos carreteros y cambios en los sitios de abastecimiento han contribuido al problema. Los estados más afectados son Veracruz, Puebla, Tlaxcala, Estado de México y la Ciudad de México. Robles Serrano hizo un llamado a la calma, aclarando que no se trata de un desabasto total, sino de una estrategia para administrar el suministro disponible. “Quizá algunas empresas no les ha llegado el gas porque se suministran principalmente de Pemex, pero hay otras empresas que están logrando abastecerse del sector privado”, explicó. A pesar de los costos adicionales para las distribuidoras, aseguró que el precio al consumidor se mantendrá controlado por la Secretaría de Energía. La industria también aprovechó para reiterar su petición de aumentar la capacidad de almacenamiento de gas LP en el país a un mínimo de 15 días, como medida preventiva ante futuras contingencias.