Tras una heroica clasificación en penales contra Argentina, las expectativas eran altas, pero el partido se complicó temprano.

Al minuto 15, el defensa José Navarro cometió un penal que Rafael Quintas convirtió en el 1-0 para Portugal. La situación empeoró para México cuando el mismo Navarro fue expulsado con tarjeta roja directa al minuto 36 por un codazo revisado en el VAR, dejando al equipo con un hombre menos por casi una hora de juego.

En la segunda mitad, Portugal capitalizó su ventaja numérica y desató una ofensiva letal.

Anísio Cabral marcó el 2-0 al 47', y en una ráfaga de cuatro minutos hacia el final del partido, Martim Guedes (81'), Miguel Figueiredo (83') y Yoan Pereira (85') sentenciaron la goleada. La frustración del equipo mexicano se hizo evidente cuando el portero Santiago López, héroe en la ronda anterior, también fue expulsado al minuto 88. El director técnico Carlos Cariño reconoció el impacto de las bajas y la expulsión temprana: "Es un resultado muy doloroso, la expulsión cambia radicalmente el rumbo del partido.

Creo que también la falta del plantel completo nos golpeó un poco", declaró, refiriéndose a los cuatro titulares suspendidos para este encuentro.