La posible ausencia de ambos para el Clásico Tapatío generó una gran preocupación, pero su rápida recuperación representó un impulso anímico fundamental para el equipo. Ambos futbolistas tuvieron que abandonar el campo en La Corregidora, encendiendo las alarmas en el cuerpo técnico de Gabriel Milito. Armando, el goleador del equipo, sufrió una “sobrecarga muscular en el aductor”, mientras que Bryan, titular indiscutible en la lateral izquierda, recibió “un golpe en una zona algo compleja”. El técnico argentino admitió la preocupación, calificando la situación de Armando como un “gran riesgo” y manteniendo en observación la evolución de Bryan. La incertidumbre creció cuando ambos se ausentaron del entrenamiento del jueves, dejando su participación “en el limbo”. Sin embargo, para alivio del Rebaño, los dos jugadores se recuperaron a tiempo y fueron incluidos en la convocatoria para enfrentar al Atlas.

Esta noticia fue un respiro para Milito, que recuperaba a dos de sus piezas más importantes, aunque su titularidad no estaba asegurada.

La recuperación de Armando quedó plenamente confirmada con su espectacular actuación en el clásico, donde anotó un triplete.