Sin embargo, el propio mediocampista del América se encargó de aclarar que no se trata de una lesión, sino de una condición congénita llamada “rótula bipartita”. Tras el encuentro, Fidalgo explicó a los medios de comunicación la naturaleza de su dolencia para evitar especulaciones.

“Realmente es que no tengo una lesión. Yo no tengo lesión en la rodilla de ningún tipo, simplemente es que nací con una condición diferente”, declaró. Explicó que la rótula bipartita significa que su rótula está compuesta por dos huesos separados en lugar de uno solo, lo que hace que la zona sea más sensible. El dolor que experimentó fue consecuencia de dos fuertes golpes recibidos en partidos anteriores contra Juárez y Chivas.

A pesar de la molestia, el jugador español mostró su compromiso y su deseo de seguir compitiendo. “Como bien sabes, no me gusta parar si puedo evitarlo”, afirmó, dejando clara su intención de continuar ayudando al equipo aunque sea con minutos limitados.

Esta revelación ofrece un contexto importante sobre su estado físico y su capacidad para manejar el dolor.