La posible baja de De Jong, en particular, era vista como un problema mayor para el mediocampo del equipo. Sin embargo, la situación se resolvió favorablemente y ambos pudieron participar en la última sesión de entrenamiento antes de viajar a Madrid. Su regreso fue una noticia positiva para el cuerpo técnico, que podrá contar con dos piezas fundamentales, uno en la defensa y otro en la creación de juego, para el exigente enfrentamiento en el Santiago Bernabéu. Su disponibilidad contrasta con la baja confirmada de Raphinha, pero alivia en parte los problemas de plantilla que enfrenta el equipo.