La vulnerabilidad del equipo quedó expuesta en la derrota en casa por 0-2 ante el campeón vigente, Pachuca Femenil.

Este resultado fue parte de una racha de malos resultados que llevó a la directiva a tomar decisiones drásticas, cesando a la entrenadora Amelia Valverde.

En su lugar, Leonardo Álvarez asumió el cargo, debutando en casa precisamente en esa derrota contra las Tuzas. Para fortalecer el nuevo cuerpo técnico, el club incorporó a un nombre de experiencia en el fútbol varonil: David Patiño, exjugador de Monterrey y con una larga trayectoria como entrenador, quien se unió como auxiliar técnico de Álvarez.

Esta reestructuración busca devolverle al equipo la solidez que lo ha caracterizado.

En contraste con sus dificultades en el torneo local, Rayadas demostró su potencial en la Concacaf W Champions Cup, donde lograron una contundente e histórica goleada de 8-0 sobre el Alianza Women de El Salvador. Este resultado, con un hat-trick de la joven Alice Soto, sirvió como un golpe de autoridad y una inyección de confianza en medio de la transición que vive el equipo.