Esta filosofía se vio reflejada en la cancha, donde los canteranos fueron la solución ante un equipo con ausencias y bajo rendimiento.

El exentrenador Efraín Flores también comentó sobre el tema, advirtiendo que los jóvenes debutantes corren “constante peligro de perder el piso” y necesitan un acompañamiento cercano para consolidarse. Sin embargo, el debut soñado de Samir Inda, quien tiene 17 años y 11 meses, podría traer consecuencias para el club. Su camiseta mostraba el patrocinio de una casa de apuestas, algo que el reglamento de la Liga MX prohíbe explícitamente para jugadores menores de edad. La normativa establece que “no se permitirá publicidad en el uniforme que contenga o haga alusión a bebidas alcohólicas y/o casas de apuestas en futbolistas menores de edad”. Este descuido podría llevar a una investigación por parte de la Comisión Disciplinaria y resultar en una multa económica para el Guadalajara, poniendo de manifiesto la necesidad de un cuidado integral que va más allá de lo deportivo.