Estos resultados consolidan a ambos equipos como serios aspirantes al título.

Sin embargo, la jornada también estuvo marcada por la controversia. Tras la derrota de su equipo, Óscar Fernández, entrenador de las Bravas, criticó duramente la regla de menores, la cual obliga a los equipos a cumplir con una cuota de minutos para jugadoras jóvenes.

Fernández calificó la norma como "absurda" y un "negocio vulgar", argumentando que obliga a alinear a futbolistas que no están preparadas, lo que genera problemas en el vestidor y expone a las jóvenes a lesiones. "Hay unas que se están partiendo la madre, pero tienes que poner a las otras para cumplir los minutos", sentenció el estratega, abriendo un debate crucial sobre las políticas de desarrollo en la liga.