Aunque la directiva, por ahora, parece mantener el respaldo a Juárez, la presión aumenta.

Exjugadores como Jesús Ramírez han pedido paciencia, reconociendo la pasión del técnico pero admitiendo que “los resultados tienen que ir acompañándolo”.

Además, lesiones de jugadores clave como Aaron Ramsey han complicado aún más el panorama para un equipo que no logra encontrar consistencia.