Figuras históricas como Francisco Palencia han cuestionado la elección de refuerzos, argumentando que “no fueron los adecuados para el espíritu universitario”. A pesar de la presión, el exjugador y técnico Jesús Ramírez pidió paciencia para Juárez, reconociendo que la afición reclama resultados inmediatos.

Esta mala racha se reflejó en el Ranking de Clubes de Concacaf, donde Pumas descendió tres lugares. La situación no es mejor en la Liga MX Femenil, donde el equipo de Marcelo Frigério ha acumulado seis derrotas consecutivas, la más reciente un 3-4 en casa ante Atlas. El propio Frigério admitió sentir “vergüenza y frustración”, atribuyendo la crisis a un agotamiento físico y mental de un equipo “que no estaba acostumbrado a perder”. La doble crisis deportiva pone en alerta a la directiva auriazul, que debe gestionar la presión y encontrar soluciones para revertir el rumbo en la recta final de ambos torneos.