Al minuto 80, Álvaro Ángulo convirtió un penalti para empatar el partido. El empate no era suficiente, y casi al final del encuentro, Alan Medina anotó el gol del milagro tras un doble remate en un tiro de esquina, desatando la euforia de los pocos aficionados universitarios presentes. Esta victoria no solo significó la clasificación agónica de Pumas, sino que también le arrebató el liderato a Cruz Azul, que terminó cayendo al tercer puesto de la tabla general. El defensor Pablo Bennevendo había expresado confianza previa al duelo: "El equipo está con la confianza y con la mentalidad de meternos al Play-in, al final de cuentas queda en nuestras manos".