Sin embargo, el objetivo no se cumplió. Puebla terminó el torneo con solo 12 unidades, de las cuales seis se consiguieron bajo el mando del argentino.

Su saldo fue de dos victorias y dos empates en los partidos que dirigió, un rendimiento insuficiente para la directiva.

A través de un comunicado oficial, el club agradeció “el profesionalismo y compromiso demostrado” por Cristante y su cuerpo técnico, deseándoles éxito en sus futuros proyectos. Este despido se suma a una serie de salidas prematuras en la carrera de Cristante como estratega, la cual contrasta con su exitosa trayectoria como futbolista, donde fue multicampeón con el Toluca. Su carrera en los banquillos incluye dos etapas con los Diablos Rojos, donde alcanzó un subcampeonato en el Clausura 2018 como punto más alto, pero ambas gestiones terminaron por malos resultados. Posteriormente, tuvo breves y poco exitosos pasos por Querétaro en el Clausura 2022 y FC Juárez hasta el Clausura 2023, acumulando despidos que han impedido que su proyecto deportivo se consolide en algún club de la Liga MX.