Nada más cuáles son las reglas”.

Su principal argumento es la necesidad de fortalecer la segunda división para que los equipos que asciendan sean competitivos y financieramente viables.

Comparó la situación con modelos europeos, donde existe un “piso” económico y estructural en las categorías inferiores. “Todo mundo habla del ascenso y descenso en España, en Inglaterra, pero ahí hay un orden entre la primera y segunda... Aquí es lo que no hemos logrado, tener el piso en Expansión”, explicó. El propietario del América admitió que “quizás la estrategia del fortalecimiento de la Liga de Expansión no ha sido la mejor”, abriendo la puerta a una reevaluación del modelo actual que fue implementado en 2020 tras la suspensión del ascenso y descenso debido a la pandemia. Su posicionamiento es clave, ya que proviene de uno de los dueños más poderosos de la Liga MX, cuya opinión tiene un peso significativo en las decisiones de la asamblea de dueños. La discusión se da en un contexto donde equipos de la Liga de Expansión, como el Atlante, a pesar de ser contendientes constantes, no tienen la posibilidad de ascender, lo que ha generado críticas sobre la falta de mérito deportivo en el sistema actual.