Una de sus mejoras más notables es la pantalla OLED de 8.8 pulgadas, que ofrece una tasa de refresco de 144 Hz, superando a muchos de sus competidores y prometiendo una experiencia de juego más fluida y con colores más vivos. Estará disponible en configuraciones de 16 GB y 32 GB de memoria RAM LPDDR5X.
El anuncio más estratégico es la futura incorporación de la "Xbox Full Screen Experience" (Xbox FSE), programada para la primavera de 2026. Se trata de un sistema operativo basado en Windows 11 y optimizado para videojuegos, que concentra los recursos del sistema en la ejecución de los títulos y funciona como una interfaz centralizada para acceder a diferentes tiendas como Steam, Battle.net y GOG. Esta integración de software, similar a la que se encuentra en la ROG Xbox Ally, tiene como objetivo mejorar significativamente el rendimiento, la estabilidad y la cantidad de fotogramas por segundo, ofreciendo una ventaja competitiva clave en un mercado cada vez más concurrido.