Por su parte, Sam Altman afirmó que desarrollar sus propios aceleradores les permitirá “alcanzar nuevos niveles de capacidad e inteligencia”.

Esta estrategia no solo busca reducir costos operativos, estimados en miles de millones de dólares, sino también integrar directamente en el hardware los aprendizajes obtenidos en la creación de modelos como ChatGPT.

La alianza posiciona a OpenAI junto a otros gigantes tecnológicos como Google y Amazon, que también desarrollan sus propios semiconductores.

A pesar de este nuevo enfoque, OpenAI mantiene sus acuerdos con Nvidia y AMD, asegurando un ecosistema de hardware diversificado para sostener su ambicioso plan de expansión y su liderazgo en la carrera de la inteligencia artificial a nivel global.