En Europa, el aeropuerto de Heathrow, NatWest y Vodafone también registraron interrupciones, y en Escocia, la votación en el Parlamento se suspendió temporalmente.

Microsoft atribuyó la causa a un “cambio de configuración involuntario” y movilizó a sus equipos técnicos para revertir la configuración y restablecer los servicios.

El problema principal parece haberse originado en Azure Front Door, el sistema que gestiona y distribuye el tráfico de la red.

Este evento subraya la creciente dependencia del ecosistema digital en un número reducido de gigantes tecnológicos. Expertos en ciberseguridad, como Saqib Kakvi de la Universidad Royal Holloway, advirtieron sobre el riesgo sistémico que representa la concentración de servicios en la nube en manos de Microsoft, Amazon y Google. Kakvi comparó el incidente con el reciente apagón de Amazon Web Services, señalando que, aunque la consolidación ofrece eficiencia económica, también crea una vulnerabilidad significativa donde un error mínimo puede tener consecuencias globales paralizantes.

Microsoft informó que los servicios comenzaron a restablecerse gradualmente y que continúa investigando para evitar futuros incidentes.