La empresa tecnológica XPeng presentó a IRON, su androide de segunda generación, cuyos movimientos fluidos y capacidad para mantener conversaciones generaron asombro.

Equipado con una columna vertebral artificial, “músculos biónicos” y tres chips de IA de diseño propio, IRON es capaz de interpretar lenguaje natural e interactuar con su entorno con gran precisión. El CEO de XPeng, He Xiaopeng, confirmó que la producción en serie comenzará en 2026, con el objetivo de integrar al robot en fábricas, hospitales y ciudades inteligentes. Por su parte, Foxconn, el gigante manufacturero, anunció su plan de incorporar robots humanoides en sus líneas de producción de servidores de IA en los próximos seis meses, comenzando en su planta de Houston, Texas. Esta iniciativa, en colaboración con NVIDIA y la empresa china UBTECH Robotics, busca optimizar la producción y asumir tareas repetitivas o de riesgo.

Eddymar Coronel, de Fracttal, explicó que estos robots “permiten que los equipos humanos se concentren en decisiones estratégicas”. Estos desarrollos contrastan con el enfoque occidental, a menudo centrado en la investigación de la inteligencia artificial general (AGI), mientras China prioriza aplicaciones funcionales e inmediatas que ya se están desplegando en sectores como la seguridad, con robots bomberos como el Unitree B2.