Marcas como BYD y Tesla, que importa sus modelos 3 e Y desde Shanghái, son identificadas como las más perjudicadas. Sin embargo, algunos analistas, como el exembajador Jorge Guajardo, consideran que un arancel del 50% apenas “les haría cosquillas” a los fabricantes chinos debido a sus bajos costos de producción.

La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) advirtió que la medida pone en riesgo inversiones por 60,000 millones de pesos en 800 puntos de venta de marcas chinas.